Los morteros a la cal son un mortero compuesto a base de cal, áridos y aditivos naturales. Según la formulación particular de cada producto, la cal empleada puede ser aérea o hidráulica. Esta composición confiere al revestimiento de un carácter bioclimático, es decir, el soporte se vuelve muy permeable permitiendo la transpirabilidad sin perder un ápice de su capacidad impermeable frente el agua.
Pero, ¿Qué es exactamente?
El mortero a la cal y su origen
El mortero de cal, o como también era conocido por los antiguos romanos, mortarius; es una elaboración compuesta por cal, áridos y aditivos naturales, composición que dota de un carácter bioclimático al revestimiento, volviendo muy permeable al soporte, con lo cual gana en transpirabilidad, sin dejar de conservar su característica impermeable. La cal empleada puede ser de dos tipos de forma básica: aérea o hidráulica. La aérea carbonatará al contactar con el aire, a diferencia de la hidráulica, que ocurre tras fraguar en agua.
Se trata de la principal aplicación de la cal en construcción, con una larga trayectoria histórica en el sector que certifica sus excelentes prestaciones.
El mortero es uno de los más habituales en obras de rehabilitación y restauración, con especial incidencia en edificios de patrimonio histórico. Y es que la cal es un material de construcción que ya era famoso en el siglo VI a.C. De hecho, diferentes investigaciones Grecia clásica o el Imperio Romano; así como por los mayas, incas y aztecas en América y por las primeras dinastías chinas.
Ventajas del uso de mortero de cal en la construcción.
Es importante saber aprovechar la versatilidad de los morteros. Puedes emplearlos en infinidad de proyectos y obtener unos resultados siempre excelentes al mismo tiempo que haces tu pequeña aportación a un planeta sostenible y a una forma de construcción mucho más ecológica.
El uso del mortero va a depender de su finalidad. Existen morteros para pegar y rellenar espacios entre bloques o ladrillos, para el revestimiento de paredes, para adherir baldosas, aplanados y recubrimientos de suelos en áreas interiores y exteriores, así como para ayudar a dar firmeza en los suelos, entre otros. Así, según su finalidad, existirá una variación en la composición y, por ende, en las aplicaciones del mortero.
Propiedades aislantes
En cuanto a sus propiedades como aislamiento, los morteros a la cal ofrecen excelentes resultados de aislamiento térmico y acústico.
Tienen propiedades únicas que los convierten en una opción interesante como aislamiento térmico en ciertas aplicaciones de construcción.
Pueden proporcionar un buen aislamiento térmico debido a su baja conductividad térmica. Esto significa que son capaces de retardar la transferencia de calor a través de la estructura en la que se aplican, lo que puede ayudar a mantener la temperatura interior más estable y reducir la pérdida de calor en invierno y la ganancia de calor en verano.
La cal es un material natural y transpirable que permite que el vapor de agua pase a través de él. Esto es beneficioso en aplicaciones donde es importante permitir que la humedad se escape del interior de la estructura, como en paredes de mampostería antiguas o en edificios históricos donde la condensación interna puede ser un problema.
Tiene buenas propiedades ignífugas y pueden ofrecer una cierta protección contra el fuego. Aunque no son incombustibles, la cal puede resistir altas temperaturas sin quemarse ni desprender gases tóxicos, lo que puede contribuir a la seguridad de la estructura en caso de incendio.
Duradero y resistente
También pueden ser duraderos y resistentes si se aplican correctamente. Tienen la capacidad de endurecerse con el tiempo, lo que los hace adecuados para aplicaciones de larga duración en condiciones climáticas adversas.
En edificaciones antiguas o históricas, los morteros son a menudo la opción preferida para trabajos de restauración y conservación debido a su compatibilidad con los materiales originales y su capacidad para permitir que las estructuras respiren.
Sin duda son una opción respetuosa con el medio ambiente que combina propiedades de aislamiento térmico y regulación de la humedad.
Aplicaciones del mortero en diversos proyectos de construcción
Los distintos usos pueden ser hormigones para cimentaciones, construcción de muros de piedra natural o bloques de fábrica, revestimientos interiores y exteriores, pinturas, fijación de tejas, colocación de pavimentos, tanto interiores como exteriores, inyecciones para la estabilización de muros y bóvedas, etc. Por supuesto, como aislamientos para viviendas o locales.
En Albacork Distribución ofrecemos distintas soluciones como las siguientes:
