Como ya hemos afirmado en más de una ocasión, los aislamientos insuflados son una técnica eficaz y rápida para mejorar la eficiencia energética de una vivienda, pero su éxito depende de una correcta instalación. A continuación, enumeramos los errores más comunes al realizar este tipo de aislamiento y ofrecemos soluciones prácticas para evitarlos, tal y como lo realizamos en nuestros trabajos en Albacork Distribución.
Un error muy habitual es comenzar aislamientos insuflados sin analizar las condiciones de la vivienda, como la existencia de humedades, grietas o problemas estructurales. En esos casos, cualquier acción llevada a cabo puede incluso empeorar problemas existentes, como la acumulación de humedad o la formación de moho, y reducir la efectividad del aislamiento.
Antes de empezar, debemos realizar un diagnóstico completo de la vivienda. Evaluar las paredes, cavidades y posibles problemas de humedad o daños estructurales. Si existen humedades, trata la causa raíz antes de insuflar el material aislante.
Utilizar materiales que no son adecuados para las necesidades específicas de la vivienda o el clima local es otro error muy frecuente. El aislamiento puede ser menos efectivo o incluso generar problemas adicionales, como baja transpirabilidad o inflamabilidad.
Por ello debemos selecciona productos de aislamiento ecológico adecuados para cada caso como por ejemplo la fibra de celulosa, ideal para climas fríos por su excelente capacidad térmica, corcho granulado, resistente a la humedad, perfecto para zonas húmedas o también, fibra de madera, una buena opción para aislamiento acústico.
Otro error típico suele ser el de no distribuir el material de forma uniforme o dejar huecos sin cubrir. Se generarán puentes térmicos, áreas donde se pierde calor, reduciendo la eficiencia del aislamiento.
Un trabajo profesional de aislamientos insuflados utiliza equipos especializados asegurándose de que el material se distribuya uniformemente. Los instaladores deben usar técnicas de verificación, como inspecciones térmicas o cámaras de endoscopia, para identificar posibles huecos y corregirlos antes de finalizar.
Es importante tener en cuenta que es importante realizar el aislamiento insuflado garantizando una correcta ventilación en la vivienda. Esto puede incrementar la acumulación de humedad en el interior y provocar humedades por condensación.
Asegúrate de que la vivienda cuenta con una ventilación adecuada antes de realizar insuflados. En algunos casos, puede ser necesario instalar sistemas de ventilación mecánica controlada (VMC) para garantizar un flujo de aire saludable y evitar la condensación.
Perforar agujeros en ubicaciones incorrectas o con tamaños no adecuados para la aplicación del material puede provocar daños en la estructura de la pared o una cobertura insuficiente del aislamiento.
De ahí que sea importante perforar los agujeros en patrones estratégicos que aseguren una distribución uniforme del material. Usa herramientas especializadas para minimizar los daños y realiza pruebas en áreas pequeñas antes de aplicar el aislamiento en toda la superficie.
Al igual que es importante perforar los agujeros correctamente es también necesario dejar los agujeros de insuflados bien sellados o con acabados estéticos. No hacerlo puede conllevar pérdida de aislamiento, filtraciones de aire o deterioro de la apariencia de la pared.
Utiliza materiales de sellado adecuados, como masillas o tapones compatibles con el tipo de pared. Asegúrate de que el acabado final sea homogéneo y, si es necesario, pinta o recubre la superficie para restaurar la estética original.
Intentar realizar aislamientos insuflados sin experiencia o recurrir a instaladores sin certificación es un error que no debes cometer. Provocará instalaciones defectuosas, falta de garantías y menor durabilidad del aislamiento.
Siempre contrata a profesionales especializados en aislamientos insuflados como los de Albacork Distribución que trabajen con productos de aislamiento ecológico de calidad. Asegúrate de que cuenten con experiencia demostrable y referencias, como es nuestro caso.
Error: insuflar una cantidad insuficiente de material aislante o usar un espesor inadecuado tendrá la consecuencia de que la capacidad de aislamiento térmico y acústico puede no ser suficiente para cumplir con las expectativas.
Por eso es importante calcular correctamente la cantidad de material necesario y ajusta el espesor del aislamiento según las necesidades específicas del espacio y el clima. Sigue las recomendaciones del fabricante del material aislante.
Por último, otro error es no realizar inspecciones periódicas para verificar la efectividad del aislamiento después de la instalación. Conllevará pérdidas progresiva de eficiencia debido a asentamientos del material o cambios en la estructura. Programa inspecciones periódicas para asegurarte de que el material aislante se mantiene en buen estado. Si detectas asentamientos o huecos, realiza un refuerzo puntual del aislamiento.
El aislamiento insuflado es una solución eficiente y sostenible, pero su correcta instalación es clave para garantizar su efectividad. Evitar estos errores comunes y seguir buenas prácticas no solo mejorará el confort térmico y acústico de tu vivienda, sino que también optimizará el rendimiento de los productos de aislamiento ecológico utilizados. Confía siempre en profesionales cualificados y en materiales de calidad para obtener resultados duraderos y respetuosos con el medio ambiente. Confía en Albacork.
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