Aislante de celulosa

Aislante fabricado a partir de celulosa reciclada que ofrece excelentes cualidades térmicas y acústicas.

Descripción

El aislante de celulosa es un aislante fabricado a partir de celulosa reciclada que ofrece excelentes cualidades térmicas y acústicas.

Se trata de un material ignífugo y antifúngico que presenta una elevada permeabilidad al aire y una excelente resistencia a la humedad, ya que admite absorber hasta un 17% de humedad sin perder sus cualidades termoaislantes.

Por ello está especialmente indicado para estructuras de madera, incluso para aquellas sin tratamiento antihumedad.

FICHA TÉCNICA
  • Producto natural
  • Compuesto por fibras naturales y recicladas
  • Fácil aplicación
  • Regulador natural de humedad
  • Producto ignífugo y antifúngico
  • Producto 100% reciclable y no contaminante
  • No irrita la piel ni las vías respiratorias
  • Resistencia a insectos y roedores
  • Idóneo para una construcción sostenible
  • Excelente resistencia mecánica
  • Producto duradero
  • No degradable
  • Producto certificado
  • Marcado CE
  • Composición: Celulosa + Algodón + PET
  • Conductividad térmica: 0.036
  • Color: Arena
  • Espesores (mm): 40/ 50 / 60 / 80 / 100
  • Densidad: 38 Kg/m3
  • Ligado de fibras: Ligado térmicamente
  • Resistencia al fuego: Euroclase F
  • Resistencia térmica (m2K/W): 1,111

¿Qué es el aislante de celulosa?

El aislante de celulosa es un material de aislamiento térmico altamente efectivo y sostenible que se utiliza para mejorar la eficiencia energética de las edificaciones. Fabricado principalmente a partir de papel reciclado, el aislante de celulosa es una opción respetuosa con el medio ambiente y contribuye a reducir la huella de carbono de un proyecto de construcción.

Excelentes propiedades de aislamiento

Este tipo de aislante ofrece excelentes propiedades de aislamiento térmico, ayudando a mantener una temperatura interior confortable en todas las estaciones del año. Su estructura fibrosa y densa proporciona una barrera eficaz contra la transferencia de calor, lo que ayuda a reducir la pérdida de calor en invierno y el ingreso de calor en verano.

Distintas aplicaciones

El aislante de celulosa se puede aplicar en una variedad de áreas, incluyendo paredes, techos, áticos y suelos. Se instala soplando o inyectando en cavidades existentes, lo que facilita su integración en proyectos de construcción y renovación. Además, su capacidad para adaptarse a diferentes formas y estructuras lo hace ideal para aplicaciones en áreas con formas irregulares o difíciles de alcanzar.

Beneficios

Además de sus beneficios en términos de eficiencia energética, el aislante de celulosa también ofrece otras ventajas, como la regulación de la humedad y la mejora de la calidad del aire interior. Al absorber y liberar la humedad de manera controlada, ayuda a prevenir problemas de condensación y moho, creando un ambiente interior más saludable y confortable para los ocupantes.

Solución versátil y efectiva

El aislante de celulosa es una opción versátil, efectiva y sostenible para mejorar el rendimiento térmico de una edificación. Su capacidad para proporcionar un aislamiento de alta calidad, combinado con su impacto positivo en el medio ambiente, lo convierte en una opción popular entre arquitectos, contratistas y propietarios de viviendas preocupados por la eficiencia energética y la sostenibilidad.